Los extintores de incendios de clase K utilizan agentes extintores especiales que separan y absorben los elementos de calor del fuego: el combustible, el oxígeno y el calor necesarios para iniciar un incendio. 
La neblina húmeda que se genera al descargarlos contiene acetato de potasio que reacciona con la grasa de cocina para crear una manta que enfriará el líquido inflamable y bloqueará el oxígeno, extinguiendo las llamas y evitando que se vuelvan a encender. 
Los incendios de clase K solo se pueden apagar con extintores de incendios de clase K y nunca se deben rociar con agua, ya que esto podría aumentar la propagación de los líquidos de cocción.